jueves, 8 de septiembre de 2011

La Característica Mirada de Abdelmumin Aya

El bien en el Islam se hace siempre en beneficio de alguien o algo y en un momento concreto, donde no hay beneficio para alguien o para algo no hay bien alguno. Igual que no hay un concepto abstracto y rotundo de Bien, tampoco hay un concepto de Mal absoluto.

El ateísmo solo tienen sentido cuando Dios es una idea. Para los que sienten que Allah es el fundamento de la realidad y lo que da hechura a todo lo que existe, negarlo es tan absurdo como negar la liquidez del agua, el negro de la noche, o la consistencia de la piedra. Allah es la realidad misma que nos estructura y nos sostiene; no una entelequia mental sostenida por dogmas incomprensibles.

El Islam no viene a mostrar algo en que creer, sino un quehacer.

"Allah quiere aliviaros, ya que el hombre es débil por naturaleza". Se nos dice que somos débiles precisamente para que nunca tengamos la tentación de sentirnos culpables.

Con nuestros hermanos nos enfrentamos a nosotros mismos, y ésa es la única manera de llegar a conocernos realmente. No es posible la autorealización sin sociedad, y no es posible la sociedad sin conflicto. Negarse al conflicto es negarse al hecho humano.

Allah, un Dios que -al parecer- va a admitir todas las metáforas que nos acerquen a Él, pero que rehusará quedarse fijado a ninguna de ellas.

El Isalm, tal como descendío a Muhammad, exige de nosotros, ahora y luego, en este mundo y en el Paraiso, una reconciliación con nuestra naturaleza animal.

El Islam No Es Lo Que Crees, Abdulmumin Aya, Kairós, 2010.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Consejos de Ali... para todo el mundo.

El pago por una dura pero honorable y respetable tarea, oficio o profesión, aunque pequeño en cantidad, es mejor que la riqueza que puedas acumular a través del pecado y de la maldad... A menudo el hombre hace los esfuerzos más grandes por conseguir las cosas que son las más perjudiciales para él y a menudo uno mismo se hace el mayor daño. Quien habla demasiado comete las mayores equivocaciones.

Haz el bien a tu hermano cuando él está empeñado en hacerte daño. Cuando él ignore o se niegue a reconocer el parentesco contigo, trátalo como amigo. Ve en su ayuda y busca mantener las relaciones. Si él es tacaño y se niega a ayudarte económicamente, sé generosa con él. Si te perjudica, acepta sus excusas. Compórtate con él como si fuera el amo y tú el esclavo, como si él fuera el benefactor y tú el beneficiario. Pero está atento para no obrar así con personas ruines y que no lo merecen. Si es injusto contigo, sé amable y considerado con él.

Aconseja a tus amigos sinceramente y de la mejor forma que puedas, aunque pueda no gustarles.

Conserva un control compelto sobre tu temperamento y enojo, porque yo nunca encontré nada más beneficioso a la larga y que produzca mejores resultados, que tal control.

Sé suave, agradecido e indulgente con el que es rudo, grosero y severo contigo. Gradualmente él cambiará su forma de conducta.

Guía para una vida feliz (Testamento espiritual del Imam Ali al Imam Hasan), Imam Ali Ibn Abi Talib, Embajada de la República Islámica de Iran, 2000.